lunes, 27 de abril de 2015











La literatura definida como el arte de escribir, me invita a través de mis primeras lecturas: Papelucho de Marcela Paz, Corazón de Edmundo de Amicis, a evocar sueños, aventuras, que me atraparon y me acompañan hasta el presente. Al compartir con los niños, percibo  tal como me sucedió a mí de niña, cómo se conectan, viajando a través del tiempo, comparándose o viéndose en el héroe, llorando o riendo, en fin un viaje que a través de los textos literarios pueden hacer sentados en la biblioteca de su colegio, en un sofá de su casa, o como en mi caso pasando las tardes  junto a mi papá, en la librería “ La Ocasión”.
¿Y si hablamos de literatura, por qué hay que diferenciar la adulta de la infantil?
  Gemma Llunch, define la literatura infantil como “textos literarios o para literarios pensados, comercializados o editados dirigidos al público infantil “ y hace hincapié que el catalogarla   obedece más bien al  “ interés comercial y editorial”, ya que “hay libros que están escritos para adultos y que son leídos por niños y jóvenes y otros que corresponden a la LIJ, y son leídos por adultos”.
Siguiendo con Rosell:
"No es la temática –ya se ha dicho suficientemente– lo que diferencia a la literatura infantil de la reservada a consumo adulto, es el tratamiento. Pero este tratamiento (de las formas y no sólo de los temas) no debe ser visto como el sometimiento del autor a las limitaciones de comprensión de cierto destinatario, sino como el aprovechamiento de las potencialidades expresivas de ese receptor, que no es un adulto en miniatura o en constitución, sino que posee maneras propias de interpretar y representar el mundo en que convivimos grandes y chicos sin que, por obra y gracia de esa mirada especial, éste sea igual para ambos".( Rosell)



Muchos son los cambios que han surgido al interior de la literatura infantil, tras el paso del tiempo. Los clásicos de los Hermanos Grimm, de Charles Pearrault, dan cuenta de alguna forma un punto de partida en lo que a lecturas para niños se refiere. Éstos instalados en el imaginario colectivo de muchas generaciones como las primeras lecturas que  narradas al calor del regazo de la abuela o de la madre, representó las primeras experiencias con la  literatura infantil.
El enfoque formativo a modo de trasmitir valores y cómo ser mejores personas caracteriza la  literatura infantil en sus inicios. Del siglo XX, en adelante, los cambios se hacen más rápidamente, como característica de la sociedad actual. La incorporación de lo visual, lecturas no lineales, el acercamiento hacia la cotidianidad, la profesionalización en cuanto a los autores de esta línea, son algunos de los elementos que han marcado la literatura infantil desde la década del 70.
Sin dudas , me agrada hablar de literatura infantil, pero también me agrada que sean los consumidores de la misma , los que tengan la oportunidad de elegir de acuerdo a sus propias experiencias y competencias,  qué leer, sin duda que como mediadores debemos estar  disponibles a fin de guiar , encaminar , mostrar, difundir, sin olvidar que nuestra mirada debe estar lejos de la censura , con el afán de no cortar las alas de niños y jóvenes hipervinculados y enamorados de las TICs, que tanto nos cuesta que se encanten y permanezcan en las redes de la literatura.

” La literatura es siempre una expedición a la verdad”.
Franz Kafka ( 1883 – 1924 ) Escritor checo.



                    *¿Qué es la literatura infantil?
                       Un poco de leña al fuego
                       Joel Franz Rosell

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